El 19 de febrero hicimos una excursión a Sevilla para visitar el
Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC) y la
Facultad de Bellas Artes.
El CAAC está situado en el antiguo monasterio de la Cartuja, un edicficio, situado en la Isla del mismo nombre, que tiene una larga historia, pues fue monasterio originalmente, fábrica de cerámica después, sede del pabellón de España durante la Expo 92 más recientemente y, por fin, museo de arte contemporáneo.
Así fue nuestra llegada, con lluvia y y poca luz:
En el interior pudimos ver tres exposiciones temporales de tres autores contemporáneos con importantes trayectorias relacionadas con el arte conceptual y sus derivados.
La primera exposición, llamada Las dos orillas, nos mostraba obras de Agnes Varda, una artista francesa que experimentó con los lenguajes visuales y con los contenidos éticos y estéticos de sus creaciones.
Esta es la autora en uno de sus autorretratos (es una foto montada imitando un mosaico romano o bizantino):
Algunos vídeos como el de la imagen de abajo, producidos por la artista, nos impactaron y nos hicieron reflexionar sobre temas sociales y políticos, como el inicio de la revolución cubana o el papel social de la mujer en la sociedad actual:
Después vimos una exposición antológica del artista andaluz Nacho Criado, que trabajó a partir de la década de los años 60 hasta su fallecimiento hace unos años. Sus obras se enmarcan en lo que se llamó arte conceptual, con derivaciones hacia el llamado
Land Art y el
arte povera. La exposición se llama Agentes colaboradores.
Las siguientes fotos muestran algunas de sus obras, con características propias del Minimal Art (seriación, utilización de elementos industriales), del arte povera (materiales de desecho), del Land Art (transformación de amplios espacios y paisajes) y del arte conceptual (más importancia concedida al contenido que a los aspectos formales).
Y en éstas vemos a algunos alumnos mientras contemplan las obras:
La tercera y última exposición que vimos fue la del artista chino Ai Weiwei. La muestra se titula Resistencia y tradición. Si pinchas en la foto de abajo podrás leer el panel explicaivo que la presentaba:
Aquí puedes leer un
artículo de el diario El País que habla del significado y la organización de la exposición, así como de los problemas de censura que Weiwei ha tenido en su país de origen.
Contamos con la colaboración de guías que nos hablaron y documentaron sobre las obras:
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La primera obra que se veía al entrar:
Algunas piezas cerámicas que forman parte de sus montajes:
Aquí se aprecian los reflejos de los visitantes sobre las superficies de las piezas cerámicas:
Estos son unos patos que vimos a la salida de la exposición. ¿Que por qué los pongo aquí? Pues porque se me han colado al subirlos y se han quedado anclados en este lugar. Si no por qué iba a ser...
El de abajo es un pequeño detalle de una de las obras más conocidas de Weiwei. La obra completa está formada por cinco toneladas de estas pipas, realizadas en cerámica a tamaño natural.
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Al salir del Museo de Arte Contemporáneo seguía lloviendo, pero algunos estaban tan ensimismados pensando en lo que habían visto que no pareció importarles.
Ejemplo:
Antes de montarnos en el autobús para ir al centro hicimos una foto de grupo ¿A que salimos guapos?:
Después de comer nos volvimos a reunir para visitar la Facultad de Bellas Artes. Visitamos algunas aulas, como ésta de de la foto inferior sonde se imparte a la asignatura de Talla escultórica. Camilo, profesor titular de la asignatura, no dió algunas explicaciones sobre lo que se hace en este taller:
También recibimos explicaciones de la profesora de Artes Gráficas en el taller correspondiente:
Visitamos también el aula de procedimientos escultóricos, pero no hay fotos.
Después de todo esto tomamos el autobús para regresar a El Puerto. No está nada mal para una sola jornada, ¿no?
